Fracasé y no deseo continuar… Está es una idea que a las mujeres emprendedoras nos persigue diariamente. Y es que no es fácil ser mujer, madre, esposa y emprendedora, todo al mismo tiempo.
Al emprender lo hacemos enamoradas de una idea, como nuestro primer amor. Nos dejamos llevar por la ilusión y con mucha inocencia e ignorancia, comenzamos un caminar con nuestra idea esperando tener éxito.
En medio del camino encontramos esos baches que nos hacen tropezar y al caer, comenzamos a dudar de nuestro amor. ¿Y si me equivoqué? ¿Si esto no es lo mío? ¿Y si no estoy capacitada para llevar a buen termino esta idea?

¿Fracasar es igual a perder?
No, para nada. Sé que en este momento piensas “¡Claro que sí!” porque eso es lo que nos han enseñado. La verdad es que en el fracaso hay mucha enseñanza y crecimiento, pero muchos nos centramos en el dolor y la vergüenza, dejando de lado lo que se necesita aprender para poder avanzar.
¿Qué he aprendido del fracaso?
Lo primero es que TODOS fracasaremos no sólo una vez, sino muchas en el transcurso de la vida. Por lo que no lo tomes personal, intenta dejar de pensar con sentimientos incluidos y analiza qué te llevó a esa situación.
Tomemos el ejemplo de una gran mujer EMPRENDEDORA, Sara Blakely, creadora de la marca Spanx. Sara fue educada para fallar, pero no porque su padre quisiese que sus hijos fracasarán, no. El padre de Sara les enseñó a aprender, fallando. El resultado de esta educación fue que Sara creció sabiendo que el fracaso era parte del camino al éxito.
Lo segundo es que es normal sentirse mal, deprimirse y perderse por un tiempo cuando se fracasa, lo importante es limitar ese tiempo y no dejar que los pensamientos negativos gobiernen nuestra vida.
Volviendo a Sara, ella intentó ser abogada sin éxito, quiso ser un personaje en Disney, pero no tenía la altura adecuada. Al final comenzó a trabajar vendiendo fax. Un día se detuvo en la carretera y se dijo “estoy en la película equivocada” y decidió que ella quería inventar algo que fuera usado en el mundo entero.
Lo tercero es que el fracaso es un excelente maestro, los grandes éxitos en la vida se lograron luego de muchos intentos. Es por ello que no debes detenerte.
Sara unos años más tarde creo Spanx un invento que revolucionaría el mundo de la moda. Pero aún cuando parecía un excelente invento, Sara recibió por parte de la industria muchos “NO” rotundos, pero no la amilanaron y después de tanto esfuerzo logró su meta soñada.
Una cosa es fracasar y otra es detenerte. Una vez que pases el duelo y el sentimiento de vergüenza, analiza en qué momento equivocaste el camino. Reorganiza las ideas y reinicia el camino al éxito.
Cuéntame tu experiencia ¿Alguna vez has sentido la necesidad de abandonar tu emprendimiento?

Aura Pairone

Interesante este artículo Aura. Bueno a veces he sentido el fracaso, pero no me he dado por vencida aún. Considero que debo seguir aprendiendo y cambiando las rutas para ver un nuevo resultado. Gracias por tu aporte.
Que fantástico Ana que saques lo mejor del fracaso, me alegra que te haya sido de utilidad este artículo